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martes, 14 de abril de 2020

LA NARRATIVA DE POSGUERRA (TL 22 Y 23)


NARRATIVA DE POSGUERRA (TL  22 Y 23)
NARRATIVA DE LOS AÑOS 40 Y 50 (LT 22)
• La narrativa de los años 40
• La narrativa de los años 50
• Camilo José Cela. Explicación de alguna obra representativa
LA RENOVACIÓN NARRATIVA EN LOS AÑOS 60 (LT 22)
• La renovación narrativa en los años 60
TENDENCIAS NARRATIVAS A PARTIR DE LOS 70 (LT 23)
Tendencias narrativas a partir de los 70

0.       INTRODUCCIÓN
La novela durante la dictadura (1939-1975) del general Franco tuvo que enfrentarse a los condicionamientos de un contexto sociopolítico particular que, sin duda, tuvo mayor peso que en otros países: la represión en todos los ámbitos y la censura propiamente dicha que determinaron el trabajo del escritor a todos los niveles de producción; la difusión de una literatura escapista; la falta de magisterio (debido a que la Generación del 98, Galdós o Clarín están mal vistos…), el aislamiento internacional o la marcha al exilio de muchos de los narradores que habían publicado sus primeras obras antes de la guerra (Max Aub, Rosa Chacel, Francisco Ayala…).
                          
1.       NARRATIVA DE LOS AÑOS 40
Las dos tendencias mayoritarias de la narrativa de los años 40 son la novela existencial y la novela tremendista.
 Aun así entre 1936-39 se escriben diversas novelas que tienen como asunto los hechos de la Guerra Civil , el llamado TRIUNFALISMO BÉLICO, y se trata casi en su gran mayoría de obras partidista, maniqueas, marcadas por la inmediatez de la guerra y la ideología del autor. Durante los años 40 continúa el cultivo de este tipo de novela con temática recurrente como la exaltación del ejército sublevado o la proclamación del ideario falangista .  La nota común de estas novelas es su carácter apasionado, partidista y apologético. Preocupación por la exposición del tema y descuido en la forma sin profundidad psicológica y sin preocupación por la renovación estética. Gonzalo Torrente Ballester con su obra Javier Mariño es un ejemplo.
Otra tendencia que se desarrolla  en  este  período  en  el REALISMO TRADICIONAL que  se  centra  en  el análisis  de  carácter  y comportamiento de los personajes a partir de las técnicas realistas del siglo XIX, en la que destacan J.A. Zunzunegui quien plasma en sus obras la preocupación por la degradación de la burguesía o Ignacio Agustí que plantea la evolución de la burguesía catalana en Mariona Rebull.
En los años 40 son pocas las novelas que se alejan de estas tendencias como el el caso de La familia de Pascual Duarte de Camilo José Cela. y  Nada de Carmen Laforet. Con La familia de Pascual Duarte,  Cela inicia una nueva tendencia: EL TREMENDISMO. En la que se presenta el mundo rural con una visión descarnada, con personajes violentos, etc. , revela malestar y amargura. Y finalmente, la NOVELA EXISTENCIAL iniciada con la publicación de Nada de Carmen Laforet y continuada con La sombra del ciprés es alargada de Delibes; obras en las que se refleja la angustia existencial y la frustración. Ambas tendencias comparten el tono sombrío y existencial que contrasta con el triunfalismo o la actitud evasiva de la narrativa de la época.
Ø  OBRA DE CAMILO JOSÉ CELA. Explicación de una obra suya.
Su producción novelística refleja un gran dominio del lenguaje y un expresionismo narrativo teñido de humor y tremendismo.
 La publicación en 1942 de La familia de Pascual Duarte de Cela abrió el camino hacia la renovación de la narrativa española de posguerra. Esta obra está considerada la iniciadora de un movimiento llamado tremendismo, que tiende a revelar los aspectos más violentos y crueles de la existencia. Sin embargo, Cela no acepta este término. En la novela un transcriptor anónimo presenta unas memorias  escritas por un campesino condenado a muerte, Pascual Duarte. El protagonista explica en primera persona los crímenes  que ha cometido, como consecuencia del ambiente familiar y social, que según él determinó su conducta. Pascual Duarte es un antihéroe: un individuo abandonado, solitario, que utiliza la violencia para impartir su propia “justicia”. Se trata de un narrador subjetivo, ya que únicamente cuenta aquellos episodios  que le sirven para justificar sus crímenes. El autor utiliza un lenguaje coloquial que responde a la condición social de su protagonista. Sin embargo, no falta en su estilo la intención artística, y emplea un amplio vocabulario en el que incluye términos en desuso, pero de gran expresividad.

2.       NARRATIVA DE LOS AÑOS 50
En los años 50 la novela abandona la visión existencial y recoge las nuevas preocupaciones sociales. Los temas reflejan los problemas colectivos de la época con un estilo sencillo ya que pretende llegar a un público amplio. La censura se relaja lo que facilitará la aparición de obras con denuncia social que desembocará en una nueva tendencia: EL REALISMO SOCIAL, caracterizado por el uso de la técnica objetivista, el personaje colectivo y una estructura fragmentada. En el realismo social se distinguen dos tendencias: el objetivismo y el realismo crítico. El objetivismo presenta la realidad desde la perspectiva neutral, pues entiende la novela como un testimonio de la época. Sigue la teoría conductivista, según la cual la literatura debe recoger solo las acciones y palabras de los personajes y los ambientes como una cámara de filmar sin explicar los pensamientos de éstos. La novela objetivista se caracteriza porque el autor no aparece en la obra; se limita a importancia del protagonista, o bien aparece un protagonista colectivo; se concentra el tiempo y el espacio, y es una novela sencilla de estructura y estilo. El realismo crítico es  una evolución del objetivismo. Pretende denunciar de forma más explícita las injusticias sociales. El escritor asume el compromiso con la realidad, ya que intenta transformarla. La novela de los 50 tratará temas como la injusticia, la marginación o la emigración. Los autores más destacados son Carmen Martín Gaite (Entre visillos), R Sánchez Ferlosio (El Jarama), Luis Goytisolo (Las afueras) y Camilo José Cela (La colmena).
Ø  LA COLMENA DE CELA
Fue publicada en Buenos Aires en 1951, en España fue prohibida durante años, aunque circuló de manera clandestina. En ella se retrata la vida cotidiana en Madrid durante el diciembre de 1942. Las principales técnicas narrativas de esta obra son:
-El protagonismo colectivo . La acción no se centra en un solo individuo, sino en el conjunto de la ciudad. Se reflejan las miserias de una multitud de personajes, en torno  a trescientos de clase baja o de la burguesía más pobre, que luchan por sobrevivir en un entorno de soledad y frustración.
- Fragmentarismo y técnica del contrapunto. Está dividad en 215 fragmentos separados por espacios en blanco y estructurados en 6 capítulos, en los que aparecen argumentos simultáneos. El narrador en 3ª persona, a veces, aparece en 1ª persona, como si fuera el autor.

3.       NARRATIVA DE LOS AÑOS 60
A principios de la década de los 60 se produjo en España una renovación de la narrativa marcado por el cansancio de la novela social. Esta nueva novela es la llamada NOVELA EXPERIMENTAL que se centra en tres principios: El arte no debe supeditarse a la política (la novela no debe dar testimonio social ni promover la transformación), se da importancia a la de la injusticia conciencia en el sujeto de la realidad, no a la realidad en sí y la voluntad de la lengua literaria.  La renovación se planteó a partir de la pobreza estructural, técnica y estilística de las novelas del realismo social, tomando como referencia la experimentación narrativa que llevaron a cabo grandes autores europeos de principio de siglo XX como Joyce, Proust o Kafka. A la influencia de dichos autores hay que añadir la de los jóvenes autores hispanoamericanos como Gabriel García Márquez o Vargas Llosa.
Los rasgos de esta novela son:
1.       Subjetividad. Indagación o análisis de la realidad española  a través del prisma de personajes fuertemente individualizados, sumidos, a menudo, en una crisis de identidad. Aparece el monólogo interior o un tú autorreflexivo.
2.       Uso de la secuencia o el párrafo extenso o ininterrumpido frente a la desaparición del capítulo.
3.       Aparición de espacios simbólicos o míticos (Región de Juan Benet)
4.       Inclusión de materiales diversos: informes de policía, rótulos, anuncios, esquelas, citas o referencias culturales.
5.       Empleo de técnicas narrativas experimentales: desorden cronológico o licencias ortográficas o tipográficas.
6.       Voluntad de renovación estilística. Aparece un estilo barroquizante, muy elaborado, en ocasiones alejado de la lengua común.
Las obras más importantes de este tipo de novelas son Tiempo de silencio de Luis Martín Santos, Cinco horas con Mario de Miguel Delibes o Juan Marsé con Últimas tardes con Teresa.
4.       NARRATIVA A PARTIR DE LOS AÑOS 70
Con la muerte de Franco (1975) se inicia la transición democrática y una apertura al exterior al tiempo que desaparece la censura. La novela prosigue su evolución sin que los acontecimientos políticos influyan de manera inmediata; se abandona la experimentación y se retoma el relato tradicional (vuelve el relato tradicional y la acción adquiere relevancia); hay una menor implicación social de los escritores: quieren crear y contar historias, volver al argumento, al placer de leer y de este modo atraer, con distintas orientaciones como el REALISMO CRÍTICO (Visión del ahogado de J.J. Millás), la NOVELA DE LA MEMORIA (Historia de lectores. Así pues, a partir de 1975 resurge el realismo con elementos fantásticos, míticos y oníricos una maestra de Josefina Aldecoa), LA NOVELA PSICOLÓGICA (El río de la luna de J.M. Guelbenzu), LA NOVELA ALEGÓRICA  (Juegos de la edad madura de L. Landero), y LA NOVELA EXPRESIONISTA (Amado monstruo de J. Tomeo).
En la narrativa actual, no hay una orientación definida, hecho que dificulta una clasificación precisa. A menudo, los autores vuelven al intimismo o se acercan a nuevas formas de realismo, tienen cabida la fantasía y la subjetividad. Prácticamente ningún género ha estado ausente de la novela española de los últimos años; como por ejemplo la NOVELA EXPERIMENTALISTA y METANOVELA que reflexiona sobre los aspectos textuales de la creación novelística (Gonzalo Torrente Ballester La isla de los jacintos cortados), NOVELA HISTÓRICA como Extramuros de J. Fernández Santos o Soldados de  Salamina de Javier Cercas; LA NOVELA ERÓTICA que plantea la indeterminación sexual o la sustitución de la pareja heterosexual por la homosexual Octubre, octubre de J.L.Sampedro; NOVELA DE ACCIÓN, influida por la novela y cine negro americanos como la serie sobre el detective Pepe Carvalho de Manuel Vázquez Montalbán, o La verdad sobre el caso Savolta o El misterio de la cripta embrujada de Eduardo Mendoza.
A finales de los años 70, el auge de los grupos de comunicación y la generalización de la cultura crean una masa de lectores que demandan novelas entretenidas. Aparece una gran producción, variada en cuanto a temas y estilo. En este momento conviven diferentes generaciones de escritores: autores de posguerra, de los sesenta, setenta y ochenta y autores de la última promoción.

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