EL TEATRO HASTA 1936 (LT 16, 19)
• El teatro comercial
• El teatro renovador
• El teatro de Ramón Mª del Valle-Inclán
• El teatro de Federico García
Lorca
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1.
INTRODUCCIÓN
Para entender el teatro escrito o estrenado en
España en el primer tercio del siglo XX, es preciso tener en cuenta dos factores:
-
La gran cantidad
de obras estrenadas. Sólo en la temporada 1919-20 se representaron en
Madrid mil cuatrocientas obras. El público acude en masa al teatro, que es el
espectáculo por excelencia, no desplazado aún por el cine.
-
La coexistencia
de varias generaciones de dramaturgos. Coexistieron simultáneamente
diferentes autores y tendencias, de los que destacan:
o
AUTORES
REALISTAS. Benito Pérez Galdós, quien estrena Electra.
o
GENERACIÓN
DE FIN DE SIGLO. Jacinto Benavente, Carlos Arniches, Eduardo Marquina,
Francisco Villaespesa, Pedro Muñoz Seca, los hermanos Machado, Miguel de
Unamuno, Azorín, Mª del Valle-Inclán o Jacinto Grau.
o
GENERACIÓN
DE 14. Ramón Gómez de la Serna.
o
GENERACIÓN
DEL 27. Rafael Alberti y Federico García Lorca. Así como otros dramaturgos
contemporáneos que estrenan sus primeras obras antes de la Guerra Civil:
Alejandro Casona, Enrique Jardiel Poncela o Max Aub.
Todos estos autores y obras se clasifican en dos vertientes:
el teatro comercial y el teatro anticomercial, renovador o experimental.
2.
EL TEATRO COMERCIAL
En la cartelera teatral de la época predominan las obras convencionales, que responden a los gustos del público y a los dictados de los empresarios y de los
grandes actores y actrices en torno a los cuales se organizaban las compañías
(por ejemplo: María Guerrero). En esta tendencia se inscriben los siguientes autores y tipos:
-
Las comedias y melodramas rurales
de Jacinto Benavente.
-
El teatro poético,
constituido por dramas históricos en
verso (que se pueden relacionar con el deseo de evasión del presente
característico de Fin de Siglo): Eduardo Marquina con Las hijas del Cid o Francisco
Villaespesa con El alcázar de las perlas.
-
El teatro cómico, que
incluye fórmulas como:
o
La
tragicomedia grotesca de Carlos Arniches: La señorita de Trevélez
o
El astracán
(subgénero teatral cómico de principios del siglo XX que es parecido al
sainete. Utiliza el retruécano, situaciones cotidianas y disparatadas juegos de
palabras, tipificación regional del habla…) de Pedro Muñoz Seca: La
venganza de don Mendo.
o
Las comedias
de los hermanos Álvarez Quintero: Las de Caín.
o
Los sainetes
(pieza jocosa de un acto, de carácter costumbrista y popular representado
en el intermedio o a final de una función. Sustituyó al entremés de los siglos
XVIII, XIX y XX) de Arniches y los Quintero.
Frente a la visión crítica de España propia del regeneracionismo o del 98,
el teatro comercial opta por una visión
idealizada, folclórica o acrítica.
Así en la obra de los hermanos Machado La Lola se va a los puertos, donde la
protagonista que es una famosa cantaora rechazo a los hombres que la aman a
causa de su devoción por el flamenco, expresión, para ella, del alma y la
esencia de Andalucía. O en los sainetes de los hermanos Álvarez Quintero en los
que se ofrece una imagen amable de Andalucía, marcada por el buen humor y el
vitalismo.Aunque el teatro comercial ofrece, en general, resultados artísticos inferiores a los del teatro renovador o experimental, da lugar también a algunas obras destacadas de la historia del teatro español, como La señorita de Trevélez y Los caciques de Carlos Arniches o Los intereses creados de Jacinto Benavente.
2.1.CARLOS ARNICHES
Este dramaturgo, que cultivó también, con éxito, el sainete,
es el creador de una fórmula teatral denominada tragicomedia
grotesca. En estas obras se combinan elementos trágicos y cómicos, mostrando los vicios de la sociedad de la época por medio de personajes caricaturescos. Dentro de este subgénero teatral se inscriben las dos obras más perdurables del autor:
-
La señorita de Trevélez. En la que el autor critica la
ociosidad e inmoralidad de la burguesía de provincias, que se ríe del dolor
ajeno, que se forma en un ambiente de envidia, de ocio, de miseria moral...
temas en sintonía con el regeneracionismo y los autores del 98.
-
Los caciques. En la que se critica la figura del cacique
en España.
2.2. JACINTO BENAVENTE
Recibió el Premio Nobel de Literatura en 1922 y cultivó un teatro acorde con
los gustos del público de la época. Entre sus obras destacan:
-
Las comedias de ambientación
burguesa: Rosas de otoño
-
Los melodramas rurales: La malquerida.
-
La farsa Los intereses creados,
que es considerada su obra más original, en la que recrea los personajes de la
“commedia dell’art” italiana. La obra critica amablemente la hipocresía de la
sociedad burguesa regida por la conveniencia y el dinero.
3.
EL TEATRO RENOVADOR
Pertenecen a este grupo una serie de autores cuya trayectoria dramática
discurre al margen de los gustos del
público. Con la excepción del teatro de Lorca, se trata, en general, de obras con escasa presencia y repercusión en
los escenarios de la época, per más sugerentes
e innovadoras desde un punto de vista estéticos.Se incluyen en esta vertiente:
-
Los dramas de Valle-Inclán, Unamuno y Azorín.
-
El teatro vanguardista
de Ramón Gómez de la Serna
-
La producción dramática de Federico
García Lorca y Rafael Alberti.
Las obras encuadrables dentro del teatro anticomercial, renovador o
experimental comparten algunas características:
-
Abandono del
realismo. Con el teatro de Benavente, el realismo se consolidad como la
opción estética preferida por la burguesía. El sentimiento antiburgués de los
autores de Fin de Siglo se traduce, pues, en un rechazo del realismo, que
resultaba insuficiente para mostrar sus inquietudes ideológicas o
existenciales. Ejemplo de ello es la obra El señor de Pigmalión de
Jacinto Grau.
En El señor de Pigmalión de Jacinto Grau se
desarrolla la historia de Pigmalión, propietario de una compañía teatral
formada por muñecos que él construye, y que se ha enamorado de una de sus
creaciones. La dialéctica entre creador y sus criaturas permite establecer
paralelismos con diversas obras de la literatura europea como Frankenstein
de Mary Shelley o Niebla de Miguel de Unamuno.
-
El teatro como
cauce de reflexión filosófica. Así ocurre con el teatro de Unamuno (La
venda) o de Azorín, donde la acción, los caracteres o la escenografía
se vuelven deliberadamente esquemáticos y se cargan de valor simbólico.
En La venda, la protagonista es ciega de
nacimiento y aunque ha recobrado la vista tras una operación, prefiere seguir
llevando la venda en los ojos. La obra permite una interpretación en clave
religiosa. La venda representa la fe; los ojos, la razón. Esta obra puede
relacionarse con otras obras de Unamuno como San Manuel Bueno, mártir.
-
Recuperación de
formas primitivas de teatralidad. Los dramaturgos de Fin de Siglo -y los de
principios del siglo XX- retornan a subgéneros arcaicos, expresión del
primitivismo propio de la época. Cultivan así:
o
la tragedia
(Fedra de Unamuno o Bodas de sangre, Yerma y La casa de
Bernarda Alba de Lorca);
o
El auto sacramental, con personajes alegóricos
que encierran un sentido trascendente (Angelita de Azorín o El hombre
deshabitado de Alberti)
o
La farsa, desarrollada por Valle-Inclán y Lorca.
En el auto sacramental Angelita de Azorín,
a la protagonista El Desconocido, personificación del tiempo, le regala una
sortija y cada vuelta que le dé en su dedo hará transcurrir un año. A Angelita
la visitan tres ángeles para ofrecerle distintas posibilidades de futuro: una
vida de acción como periodista en EEUU; una vida tranquila como esposa de un
científico; o una vida de sacrificio y entrega al prójimo. Angelita elige la
tercera. La obra reflexiona sobre el problema del tiempo, al que se ofrece como
respuesta al espiritualismo de Fin de Siglo.
4.
EL TEATRO DE RAMÓN MARIA DEL VALLE-INCLÁN
La obra dramática de Valle-Inclán constituye, junto con la de Lorca, la principal aportación de la literatura
española al teatro occidental del siglo XX.La producción de Valle puede organizarse en tres ciclos:
-
EL CICLO MÍTICO. Las
obras de este ciclo (Comedias bárbaras y
Divinas palabras) se ambientan en una Galicia
arcaica, violenta y patriarcal. Se trata de un espacio mítico primigenio, en el que el ser humano se muestra tal
como es; cruel, codicioso, lascivo, sin las capas de racionalidad o artificio
que la civilización ha depositado en él.
o
Comedias bárbaras. Esta trilogía está formada por las
obras Cara de Plata, Águila de Blasón y Romance de Lobos. Aunque Cara
de plata sea la primera, según el orden lógico de la acción, fue
escrita quince años después de Águila de Blasón. El conjunto
presenta una absoluta unidad dramática, en la que se narra la historia de Don
Juan Manuel Montenegro -un hidalgo mujeriego y despótico, que no duda en
utilizar la violencia y la violación para conseguir lo que quiere- y la
decadencia de su familia – sus propios hijos lo asesinan después de que este se
arrepienta de la vida que había llevado-. Esta obra se relaciona con El
rey Lear de Shakespeare.
La obra presenta una agria visión del ser humano,
cuyo comportamiento se rige por la lujuria y la avaricia. Sin embargo, la
conversión final de don Juan Manuel y el contraste entre este (demoniaco, pero
con sentimientos nobles) y sus hijos (degenerados, obsesionados por la
herencia) dotan a aquel de grandeza.
Esta obra resulta la expresión de la nostalgia
por el mundo primitivo, en cierto modo idealizado, que desaparece con el
protagonista, en sintonía con el irracionalismo, el rechazo del mundo burgués o
el primitivismo de la época.
o
Divinas palabras.
Tras la muerte de su madre, el hidrocefálico Laureaniño se convierte en objeto
de codicia de los dos hermanos de la difunta que pretende explotarlo
exhibiéndolo en ferias y caminos. Su tía y su amante lo emborrachan y el niño
muere. Una multitud la pasea desnuda para lapidarla, pero su hermano la
defiende y la turba se apacigua, como
expresión, de la irracionalidad de los comportamientos humanos.
-
EL CICLO DE LA FARSA.
Pertenecen a este ciclo dos obras escritas en verso:
o
La marquesa Rosalinda.
A través de personajes dieciochescos y de la “commedia dell’arte” se recrea la
historia de una mujer casada seducida por otro hombre para construir una
parodia del modernismo de signo escapista.
o
Tablado de marionetas para la
educación de príncipes. En esta obra se incluyen varias piezas
en las que se anticipa la estética del esperpento y supone la irrupción del
tema de España en el teatro del autor.
-
EL CICLO DEL ESPERPENTO.
Valle es el creador del esperpento, que consiste en una deformación caricaturesca de la realidad para poner de relieve lo
absurdo y miserable de la existencia.
Los procedimientos
por los que se sirve Valle para lograr ese efecto deformante son:
o
La animalización y cosificación de los
personajes
o
La preferencia por ambientes sórdidos y
degradados.
El esperpento encuentra sus antecedentes en los Sueños y poemas satíricos y burlescos de
Quevedo o en las pinturas negras de Goya, y puede relacionarse con las
manifestaciones artísticas y literarias del expresionismo europeo.
Esta nueva fórmula teatral que ofrece su
cristalización más perfecta en su obra:
- Luces de bohemia.
Fue escrita en 1920, pero no se estrenó
hasta 1970. Presenta en 15 escenas la última noche de la vida de Max Estrella,
un poeta ciego y fracasado de la bohemia madrileña. La acción se estructura en
tres partes:
- Escena I. En casa de Max,
dialogan este, su esposa madame Collet y su hija Claudinita. El protagonista
que acaba de ser despedido del periódico en el que trabajaba propone suicidarse
colectivamente.
- Escena II-XII. Max y su amigo
don Latino de Hispalis inician un recorrido nocturno por Madrid, en el que se
suceden diferentes escenarios: la librería de Zaratustra, la taberna de Pica
Lagartos, la Buñolería Modernista, un calabozo, el despacho del ministro, las
calles del centro de Madrid… Cuanto empieza a amanecer, Max y Latino se sientan
en un portal y Max muerte de apoplejía. Entonces, don Latino le roba la
cartera, donde guardaba un billete de lotería.
- Escena XIII- XV. La obra acaba
con el entierro de Max, al que solo acuden el de Bradomín y Rubén Darío, el suicidio de
Madame Collet y Claudinita y la noticia de que a don
Latino le ha tocado la lotería.
La obra puede interpretarse como
una crítica feroz de la realidad
política y social de España. Max, en su ceguera, es el único capaz de ver
los males del país: la miseria, la corrupción, la ignorancia y el desdén por la
cultura, la insensibilidad burguesa hacia el sufrimiento de los desfavorecidos,
la represión policial… Solo dos personajes, el anarquista catalán, con el que
Max coincide en el calabozo y la madre cuyo hijo pequeño muere de un disparo
policial son retratados con compasión y solidaridad.
En cuanto al estilo, destacan
las acotaciones complejas y elaboradas
(pensadas más para ser leídas que para la puesta en escena), o la diversidad de variedades lingüísticas en
los diálogos (madrileñismos, argot, arcaísmos o citas literarias).
-
Se inscriben también en este ciclo esperpéntico Martes de carnaval (sátira del militarismo
constituida por Las galas del difunto,
Los cuernos de don Friolera y La hija
del capitán)
-
y las piezas que conforman el Retablo de la
avaricia, la lujuria y la muerte.
5.
EL TEATRO DE FEDERICO GARCÍA LORCA
Federico García Lorca nació en Fuente Vaqueros (Granada),
vivió en la Residencia de Estudiantes de Madrid donde entabló amistad con Dalí
y Buñuel. Dirigió el grupo La Barraca, cuyo objetivo era difundir el teatro
clásico por los pueblos de España. Su condición homosecual fue fuente de
conflictos y angustia. Lorca volvió a Granada en 1936, donde fue asesinado al
poco de comenzar la Guerra Civil; convirtiéndose su muerte en símbolo univesal
de la barbarie y la ignorancia.
5.1.
OBRA DE LORCA
García Lorca es, junto con Rafael Alberti, el principal dramaturgo del
27. En su obra dramática que, a pesar del éxito de sus obras, podemos incluir
dentro del teatro anticomercial y
renovador, se pueden distinguir diferentes bloques:
-
PRIMERAS
OBRAS. El maleficio de la mariposa y Mariana
Pineda (que se inspira en el personaje histórico, una heroína liberal
ejecutada por el monarca absolutista Fernando VII).
-
FARSAS.
o
Obras para guiñoles: Tragicomedia de don Cristóbal y
la señá Rosita y Retablillo de don Cristóbal (son dos
versiones de la misma historia, en la que la madre de Rosita vende a su hija a
don Cristóbal, un hombre adinerado y lujurioso).
o
Obras para personas. La zapatera prodigiosa y Amor
de don Perlimplín con Belisa en su jardín.
-
TEATRO DE VANGUARDIA,
EXPERIMENTAL O SIMBÓLICO.
o
Así que pasen cinco años. Un joven
debe esperar 5 años para casarse con su novia, y mientras desdeña el amor de
una mecanógrafa. Llegado el momento la novia lo abandona y él pretende a la
mecanógrafa, la cual lo hace esperar cinco años.
o
El público. Tras una representación
de Romeo y Julieta, el Director
recibe la visita de tres hombres que hablan sobre la necesidad de romper con el
disimulo y los convencionalismos, tanto en el teatro como en la vida.
-
TEATRO MAYOR.
o
Doña Rosita la soltera o el lenguaje de las
flores. Recreación del tema de la solterona.
o
Bodas de sangre. Leonardo huye con
la Novia recién casada. Perseguidos por el Novio, los dos hombres mueren al
enfrentarse en una reyerta.
o
Yerma. La protagonista no consigue
quedar embarazada. Desesperada y llena de resentimiento hacia su marido,
termina matándolo.
o
La casa de Bernarda Alba. Tras la
muerte de su esposo, Bernarda, encarnación de la intransigencia, la hipocresía
y el conservadurismo moral, decreta un luto de 8 años en los que sus cinco
hijas no podrán salir de casa. Bernarda Alba, que porta el símbolo fálico del “bastón”– y
el ansia de libertad –representada por sus cinco hijas, sobre todo por Adela–.
Toda la obra se desarrolla en un espacio cerrado y único: la casa familiar, que
es la “cárcel” en la que viven atrapadas las hijas de Bernarda. El código moral
impuesto por la madre es la ley por la que se rige toda la familia. Ese código
se basa en lo que está socialmente bien visto y en lo que no, por encima de la
piedad o el amor. El conflicto se desencadena el deseo por Pepe el Romano, un
personaje que no aparece físicamente en ningún momento, aunque está siempre
presente a causa de las continuas alusiones que hacen las hijas a él. Ante esta
situación de insatisfacción, Adela, la hija menor, no encuentra otra solución
que el suicidio.
5.2.
CARACTERÍSTICAS DE LA OBRA DE LORCA
En la producción dramática de Lorca se reconocen algunas
características comunes:
-
TEMAS :
o
Tema principal es la frustración o
insatisfacción que nace del choque entre dos fuerzas:
§
El deseo
de libertad, de plenitud erótica y vital (encarnado casi siempre por
personajes femeninos).
§
La
realidad (la sociedad, la tradición, el destino…) que se opone a su
cumplimiento.
o
temas fundamentales tanto en sus obras poéticas como teatrales:
la imposibilidad de realización personal, la frustración, el enfrentamiento
entre la libertad y el autoritarismo –siendo este el que sale vencedor- y, en
consecuencia, el destino trágico del ser humano
-
EMPLEO DE VERSO Y PROSA.
Algunas obras están íntegramente en verso (Mariana Pineda); en otras (Bodas de
sangre, Yerma…) se alternan prosa y verso. El verso permite condensar el tema de la obra o subrayar los instantes
de mayor intensidad emotiva. poco a poco, el verso se reduce a momentos de especial
intensidad o se reserva a canciones de tipo popular que crean un intenso clima
dramático: en Bodas de sangre la canción de cuna que cantan la suegra y
la mujer de Leonardo.
-
ELEMENTOS POPULARES Y
TRADICIONALES. Toda su obra está plagada de elementos populares y
tradicionales -como la música y las canciones.
-
ESPACIOS SIMBÓLICOS.
o
Lugares cerrados (las casas de las
protagonistas), herméticos, oscuros, aislados (en La casa de Bernarda Alba) que
impiden la libertad y favorecen la opresión. Se alude a este espacio (la casa)
como “convento”, “presidio”, “infierno”, etc.
o
Estos espacios son la oposición al mundo exterior que simbolizan las
pasiones, el erotismo y la libertad, pero también representan las convenciones
sociales. Otros espacios simbólicos que aparecen son el río y el pozo; el
primero es símbolo de la fuerza vital, del erotismo (Bodas de sangre), mientras
que el segundo representa la muerte.
-
SÍMBOLOS.
o
La luna:
su significación más frecuente es la de muerte, pero también puede simbolizar
el erotismo, la fecundidad, la esterilidad, o la belleza, la perfección.
o
La sangre:
representa la vida y, derramada, es la muerte. Simboliza también lo fecundo, lo
sexual.
o
El
caballo (y su jinete): está muy presente en toda su obra, representa la
vida y el erotismo masculino.
o
Los
metales: también su valor dominante es la muerte. Los metales aparecen bajo
la forma de armas blancas –navajas, cuchillos-, que conllevan siempre tragedia.
o
Ciertos
colores, como el verde, la muerte, o el blanco -relacionado con la luna y
los metales- que simboliza la frialdad y, por ende, la muerte, pero también la
pureza cuando se refiere a flores como el azahar.
o
El agua:
estancada simboliza la muerte. Si fluye, el sexo y la pasión amorosa
-
IMPORTANCIA DE LOS SIGNOS NO
VERBALES. Música, danza, vestuario, iluminación… como una concepción
del teatro como espectáculo total.
-
USO DE UN LENGUAJE INTENSAMENTE
POÉTICO. Su obra dramática está saturada de símiles, metáforas y
símbolos habituales en su obra lírica. ). Uso de metáforas, comparaciones
(“Déjame que el pecho se me rompa como una granada de amargura”) e hipérboles
(propios de la vanguardia), pero también refranes o expresiones populares y
léxico emotivo (que contagia emoción) característicos de lo tradicional o
popular.
-
DIÁLOGOS.diálogo con gran fluidez e intensidad (réplicas
cortas y rápidas). Utilización del habla
popular (especialmente andaluza).
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